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viernes, 5 de febrero de 2010

baila bailarina

-por qué bailas?
-me gusta, lo se hacer, me he especializado en hacerlo y por eso lo hago
-peor siempre? todo el tiempo?, bailas hermoso, no te lo niego, pero no es lo único, o me vas a decir que nunca te a dado curiosidad de otras cosa
-tal ves, pero prefiero hacer esto bien que muchas cosas mal
-no se trata de hacerlo bien o mal, se trata de que la vida no es una sola cosas, las personas no son solo lo que saben hacer, también los identifica lo que no saben o sus errores, no debes tenerle miedo a eso
-no le temo, simplemente no lo conosco
La bailarina dejo sus ejercicios de baile para darce cuenta de lo que ese extraño hombre le decia, habrio las cortinas del lugar y se dio cuenta que brillaba el sol, el día estaba despejado.
-Como esta mamá, recuerdo que estaba enferma, hace cuento fue eso?
-murió, pero dijo que estaba orgullosa de tener una hija que bailara tan bien

miércoles, 27 de enero de 2010

Me da penita

me da penita ver a gente ciega que no quiere ver lo que pasa alrededor... ni con señas de bengalas se darían cuanta que en verdad estan haciendo mas daño con esa actitud que con los cuentos tontos que invetan para tranquilizarce.

En fin, es lo que toca

Termina al Atardecer

-¿Hace cuanto que estas a mi lado? -le preguntó casi durmiendo en su cama a Jorge que se encontraba en un colchón improvisado en el suelo
-No estoy a tu lado ¿no ves que estoy en el suelo? duerme mejor, no debiste beber esas copas -Jorge se dio media vuelta y susurrando contesto -desde que te conosco.
Amelia siempre metida en su mundo nunca se daba cuenta de las pretenciones de las otras personas, siempre preocupada de sus achaques, de no dañar a los demás como lo había hecho su padre con su enfermedad, que lamentablemente la consumia a ella también. Una niña hermosa, hermosa solo porque lo era, sin más; pero nunca dejó que la estremeciera una caricia, una muestra de cariño.
Jorge la conoció en el hospital, él hacia terapia para las personas que salían de alta en cuadros depresivos; había sido el tercer intento de suicidio de Amelia. Pero para él era un angel, la niña más hermosa, solo porque lo era. Así empezó una amistada de complicidad entre los dos, siemrpe juntos, pero para Amelia nunca fue nada más, no podía entender que alguien la pudiera querer de tal forma, que solo estando a su lado lo llenaba, que no importaba lo que hubiera pasado en el día, solo con verla a ella el día se hacía bueno, Jorge estaba tan enamorado de ella que solo le importaba su felicidad, pero Amelia no podía verlo, solo veía que ella no era lo suficiente para este mundo.
La noche paso rápida, como siempre que Jorge se quedaba con ella cuando no podía dormir por culpa de sus fantasmas, y ella al despertar vuelve a preguntar
-¿Hace cuanto que estas a mi lado?
-¿es que acaso no te has dado cuenta? -Jorge se para de su cama para sentarce junto a Amelia -siempre he estado aquí, contigo, siempre
-si siempre has estado aquí Jorge, como tu dices ¿cómo es que no puedo verte? eres mi amigo, y te quiero demaciado, pero no puedo acercarme a ti
Jorge se paro y le dio un beso en los labios, como tantas veces lo había hecho en sus sueños, pero el final cambió. Amelia se alejó de él y lo último que alcanzó a escucharle fue "no te quiero dañar"
Ese día se tiñió con la sangre de Amelia otra ves, justo cuando el último rayo de sol tiñe las fronteras más lejanas, pero esta ves no estaba Jorge a su lado y fue la primra ves que Amelia sentia que podía verlo, pero ya era tarde, la vida ya se le había escapado junto con Jorge esa mañana.
Jorge nunca más volvió a su casa, las últimas palabras de Amelia habían causado lo contrario a sus significado, entraron como las dagas más afiladas en él y junto con el último rayo de sol, el que tiñe de rojo las fronteras más lejanas sus últimos latidos se undieron en el río que quedaba camino a las afueras de la ciudad en donde lo último que oyo fue "no te quiero dañar"

sábado, 16 de enero de 2010

Lo mejor del Día


Ahora en verano, después de terminar el día, para mi no hay cosa mejor que subir a mi pieza y abrir las ventanas de par en par y ver los cerros, una se que es el manquegue, los otros no sé como se llaman.
En eso sentarme en mi cama mirando para afuera. tomar un cigarro y disfrutarlo, con cada pitiada, inhalar y botar el humo, tomandome un té, un vaso de agua o jugo o en ocaciones incluso disfrutar de una copa de vino blanco.
En ese momento del día , que tampoco son de todos los días, mi mente funciona de mejor manera, mas tranquila y racionalmente, pero no necesariamente fria.

un saludo!

martes, 12 de enero de 2010

TENGO RABIA

tengo tanta rabia tanta pena..... quiero desahogame pero no quiero escribirlo....
ME APESTA LA INEFICIENCIA, LA BUROCRACIA ESTUPIDA QUE NO SIRVE DE NADA, XQ AL FINAL DE CUENTA IGUAL LE METEN TONGOS... NO TENGO POR QUE MENDIGAR UN DERECHO POR LA CHUCHA!!!!!!!!!!!!

domingo, 10 de enero de 2010

Un gran Paso

Solo soñaba con un día le dijera hola, se veían siempre, durante veinte años se veían siempre, pero eran de clases distintas y eso era casi decir que eran de galaxias distintas. Para la fiesta de la empresa claramente estaban todos ahí, todos trabajaban para la empresa, peor mientras ellos comían caviar, ella tenia que comer pasta de atún; ella también había ganado el premio de mejor empleado del mes, peor su premio solo fue una canasta familiar y el premio de ellos era un viaje a Brasil.
Siempre durante estos veinte años había sido así, se topaban todo el día, trabajan los dos arduamente para sacar a flote la empresa, peor ella, solo por ser de otra clase social no tenía derecho a ser tratada como persona.
Esa tarde se decidió, entró a la oficina del jefe y lo saludó, pidió hablar una palabrita con él y reaccionó poniendo la expresión de de chusma, para él ellos solo eran la chusma que explotaban.
Salió de la oficina prometiendo no llorar, no hasta llegar al cuarto de baño, estuvo ahí una hora y siguió con sus deberes hasta la hora de salida, ese día no pensaba hacer horas extras, ya no valía la pena.
Llegó a la pieza que arrendaba, ya no le quedaba comida, ese mes su hermana había enfermado y tuvo que mandarle el dinero. Se sentó en la cama y reflexionó, se puso su mejor ropa, el vestido de graduación que aun guardaba, se puso tacos, y arregló como no lo hacía desde que estudiaba en el instituto y salió de la casa, tomó la micro que la dejara en el barrio de la más alta sociedad y se dirigió al edificio más alto, subió tranquilamente hasta llegar al techo, desde ahí se podía ver todo Santiago, así debía ser, era solo el patio trasero para ellos, solo futuros empleados.
Solo le había pedido poder postular a un cargo más alto, tenía las capacidades, y solo encontró humillaciones, pero ahora, ellos tendrían que limpiar, y dio un paso al vació, y sintió que era mas llenador que cualquier cosa que ella hubiera tenido.